La inducción miofascial es una técnica de tratamiento que desde hace un par décadas ha irrumpido con fuerza dentro del mundo de la osteopatía y la fisioterapia.
Consiste en manipular las vías de tejido conjuntivo ,que forma parte de la estructura interna de los músculos y articulaciones. De esta manera podemos afirmar y la experiencia clínica lo demuestra, que los tratamientos de inducción miofascial se orientan a tratar los estados de lesión aguda o crónica promoviendo la ventaja biomecánica que el propio cuerpo necesita para reparar los daños en los tejidos corporales.
Es de especial relevancia para el enfoque terapéutico osteopático, pues el tejido conjuntivo constituye realmente la expresión material y dinámica de los órganos implicados en el movimiento corporal. Siendo el propio movimiento armónico y preciso, según los principios de valoración osteopática, signo de buena salud.